Estos pendientes están hechos en plata de ley 925 y llevan circonitas blancas engastadas formando una pequeña cruz. La plata, sin níquel, y las garras impecables muestran un ensamblaje preciso y unas proporciones equilibradas. El diseño compacto ofrece una estética limpia y discreta.
- Calidad de materiales: La plata de ley 925 y las circonitas blancas firmemente engastadas proporcionan una construcción duradera y un rendimiento a largo plazo.
- Ajuste cómodo: Pendientes de botón de perfil bajo y bordes suaves se apoyan cerca del lóbulo para llevarlos cómodamente todo el día.
- Cierre seguro: Postes con cierre de mariposa clásico mantienen los pendientes en su lugar y facilitan ponerlos y quitarlos.
Llevados solos, la cruz aporta un acento geométrico sutil y quedan bien al combinarlos con cadenas finas u otros pendientes pequeños. La plata pulida y las piedras blancas funcionan tanto con estilos informales como con camisas de vestir, creando un punto focal discreto en la oreja.
Una incorporación atemporal a la colección de cualquier hombre. Una opción sencilla y fiable para el uso diario o como un regalo pensado.